Caracas – Este sábado 19 y domingo 20 de julio entre risas, colores y juegos inundaron el Paseo Los Próceres durante una jornada especial organizada por la Fundación Generación Neurodiversa (FUNGENE) del Distrito Capital con motivo del Día del Niño. Lo que pudo haber sido una celebración más se transformó en un espacio profundamente humano, inclusivo y educativo, donde los protagonistas fueron la ternura, la diversidad y los sueños de la infancia.
Desde tempranas horas de la mañana, niños y niñas de distintos sectores del Distrito Capital comenzaron a llegar al lugar, donde los esperaban colchones inflables, pintacaritas, juegos tradicionales, estaciones de arte y mucha música. La actividad fue diseñada no solo para brindar entretenimiento, sino para crear un ambiente seguro, accesible y amoroso, donde cada niño pudiera disfrutar plenamente, sin importar su condición.
Una de las características más destacadas de esta jornada fue su enfoque inclusivo. Niños y niñas con discapacidad participaron activamente junto a sus familias, demostrando que la alegría, la creatividad y el juego son derechos de todos. Esta experiencia reafirmó que la inclusión no es un favor, sino un principio que debe regir cada espacio social.
La actividad contó con la presencia del Consejo Nacional para las Personas con Discapacidad (CONAPDIS) y la Fundación Misión José Gregorio Hernández, encabezadas por su presidenta, Soraida Ramírez Osorio, quien celebró con entusiasmo esta iniciativa. En sus palabras, destacó que “la infancia no se celebra con discursos, se celebra con acciones, con espacios accesibles, con respeto y con alegría compartida. Hoy, FUNGENE nos recuerda que los derechos de los niños y niñas con discapacidad también se festejan con sonrisas”.
Por su parte, Francis Molina, presidenta de FUNGENE, agradeció el acompañamiento institucional y expresó que la jornada busca “romper barreras y estigmas, sembrando una semilla de empatía y reconocimiento en cada familia que se acerca a compartir”. Añadió que esta celebración forma parte de un compromiso permanente de la organización con la promoción de una cultura inclusiva desde la niñez.
La jornada fue un ejemplo de corresponsabilidad entre organizaciones sociales, familias e instituciones, dando vida a un modelo de convivencia donde se respete y valore la diversidad. La alegría de los niños y niñas presentes fue el mejor testimonio de que la inclusión no es solo posible, sino profundamente transformadora.
En cada juego, en cada pintura y en cada carcajada, se sembró esperanza. Que este Día del Niño inspire a toda la sociedad a seguir construyendo una Venezuela junto al presidente de la República Nicolas Maduro donde todos los niños y niñas, sin excepción, tengan la oportunidad de crecer, aprender y ser felices en libertad y con dignidad.



